miércoles, 2 de enero de 2008

Una duda existencial...

A veces parece que todo gira, gira y gira, otras veces todo es lo mismo y otras parece que todo cambia. El común denominador es uno mismo, que a la vez también sufre variaciones, progresiones y frenazos, cuando no retrocesos. En principio todo fluye, nada permanece como defendía Heráclito de Efeso (544-484 a.C.), pero en las matemáticas más aún en la física, la ciencia que estudia entre otras cosas el movimiento, siempre se cuenta con una constante, un valor fijo e inmutable, y yo me pregunto ¿Cuál sería el valor de esa constante en cada individuo? ¿Podría ese valor tomar la forma de un sentimiento, por ejemplo?